Declaración del 4to Congreso Internacional contra Bases Militares y Guerra organizado por la campaña “Stop Base aérea Ramstein” (Stop Air Base Ramstein), con el apoyo de la red internacional “No a la guerra – no a la OTAN” (No to War – no to NATO), la Oficina Internacional de Paz (International Peace Bureau) y el Partido de la Izquierda Europea, el 25.09.2020, celebrado tanto de manera presencial (Berlín), como de manera virtual (a nivel mundial), en un evento híbrido debido al Coronavirus.

¡La resistencia es el imperativo y el reto!

Hacemos un llamado a la resistencia en contra de las aproximadamente 1000 bases militares alrededor del mundo, a unirnos en una sola voz y a fortalecernos.

• Nuestra solidaridad está especialmente dirigida en contra de las bases en Okinawa. La resistencia de toda la población de esa isla es un ejemplo de protesta realmente sobresaliente.
• La resistencia en contra de la expansión de las bases de EE.UU. en Corea del Sur es otro ejemplo motivador. Hast ahora el gran respaldo a las múltiples acciones de desobediencia civil ha logrado limitar fuertemente la expansión planificada para dichas bases.
• Las acciones en contra de las bases militares, incluyendo entre otras las de Faslane, Shannon, Ramstein y Sicilia también son prioritarias para nosotros/as.
• También queremos llamar la atención sobre la ampliación de las bases militares mayormente de EE.UU. y la OTAN en África.

Apoyamos todas las acciones dirigidas al cierre de la Base Naval de la Bahía de Guantánamo y a acabar con las violaciones a los derechos humanos asociadas a ésta. Todas estas bases sirven al mismo propósito: reforzar la confrontación con naciones tales como Rusia y China, y a la militarización de países y sociedades alrededor del mundo. Además, estas bases militares sirven para asegurar recursos, rutas comerciales y mercados internacionales a favor de los grandes grupos de poder militares. Las fuerzas que impulsan estas guerras son los EE.UU., la OTAN y sus vasallos.

La pandemia del coronavirus ha fortalecido la militarización interna y externa a nivel mundial, a pesar de los argumentos de sentido común a favor de un descenso del gasto militar para favorecer el combate contra el virus. Además las bases militares generan, de múltiples formas, una inmensa destrucción del medio ambiente y aceleran el desastre climático.

Es hora de fortalecer la resistencia a nivel mundial, de fortalecer nuestras redes y una vez más llevar nuestras acciones a la calle de manera masiva, es hora de organizar la protesta!

Somos muchos pero estamos lejos de ser suficientes. Estamos conectados a través de redes internacionales, pero aún no somos una fuerza internacional común unida. Demasiados de las y los nuestros están aún al margen, aunque sí ven los peligros de una gran guerra. Nosotros/as intensificaremos y coordinaremos mejor nuestro trabajo educacativo e informativo. Podemos aprender mucho unos de los otros para ser aún mejor unidos. Continuaremos trabajando fuertemente por lograr coaliciones más amplias y por cooperar más intensivamente con sindicatos, instituciones religiosas y organizaciones ambientalistas. Juntos podemos retroceder el reloj del día del juicio final, que actualmente está a 100 segundos de la media noche, y hacer que la paz sea un poco más segura.

Lo que queremos: El cierre de las bases estadounidenses y de la OTAN a nivel mundial, como el paso más importante hacia un mundo libre de bases militares.

Lo que sabemos: Sólo un desarme completo e integral -el cual debe comenzar por las fuerzas militares más fuertes y la abolición de todas las armas nucleares- puede garantizar la paz.

La paz necesita movimiento. Por esta razón llamamos al primer Día Mundial de Protesta Internacional contra Bases Militares durante los días internacionales en rechazo del gasto militar (GDAAMS) en abril y mayo de 2021.

Berlín, 25 de septiembre 2020